OFF CINEMA v.2
Como continuación del anterior post, intentaremos explicar ( no exhaustivamente porque tamaña empresa nos excede casi por completo ) algunas de las claves que permiten una interpretación ( personal ) de la segunda película que he visto esta semana. La película en cuestión es: " Russian ark " de Alexander Sokurov. La película de algo más de 90'' nos traslada al decorado privilegiado del Palacio de Invierno- museo Hermitage de San Petersburgo ( treinta y tres salas del mismo ). Este emplazamiento ( " maravillosísimo " como pude descubrir a propósito del film ) es indispensable para encuadrar lo que se narra. La película es un experimento formal ( técnico y artístico ) arriesgado y extraordinario en el que ininterrumpidamente ( ! un sólo plano-secuencia continuo, para toda el metraje, filmado de una sóla tirada !, una sóla cámara, sin postproducción ) se narra un material conceptualmente complejo .
" el espectador asiste a una visita guiada al museo y a la historia misma de Rusia de estos tres últimos siglos
Asistimos a la entrada de unos invitados engalanados a una fiesta ( tres mil actores - figurantes ), la fiesta de la Historia misma, les seguiremos sigilosamente y de forma guiada. ¿ Guiada por parte de quien se preguntaran?, ahí radica otra de las bazas de la película, guiada por dos interlocutores: una conciencia - espectador contemporáneo ( probablemente el propio cineasta, trasunto de las conciencias de los propios espectadores ) y una conciencia/memoria - espectador histórica ( encarnada en la figura de un cínico diplomático francés ). Ambos espectadores son las dos únicas voces principales de una história sin personajes principales; se asiste al devenir de la historia rusa misma, aunque sus protagonistas, como en la mismisima Historia, sólo podrán ser vistos ( no se aceptaran interrupciones, los interlocutores no pueden ser más que éso, espectadores de lo sucedido ). Vemos algunos de los momentos cruciales de la historia moderna de Rusia ( se hecha poderosamente en falta la referencia al período comunista ), asistimos al devenir en el mismo marco en que fueron la mayoría de los cuales acaecidos, el tiempo pasa lineal y sin interrupciones como la única secuencia de la película. El espectador siente su propia conciencia hablada, el espectador contemporáneo cuenta lo sucedido al espectador histórico, éste le explica la memoria ( no el sentido, pues es dificilmente posible ser crítico cuando se vive una época, de ahí las urticarias ante lo acaecido en el futuro y la responsabilidad ( irresponsabilidad ) de su propio presente como su causa ) histórica no sólo de la historia rusa sino del arte mismo. Ambos estan sujetos a una sóla mirada del espectador ( trasunto, como hemos dicho, de los espectadores del film ), de hecho, la Historia sólo puede ser individualmente vivida con una sola mirada ( a eso se debe la necesidad de otro interlocutor, además con el añadido de su propio acronismo. Segundo desplazamiento crucial; no se comparece sólo a la representación histórica de Rusia, sino que se visita simultániamente el museo, se reflexionará sobre el significado del arte ( su inmortalidad ) y la belleza, se morará en las obras y los estilos de las distintas salas de la pinacoteca.
La fiesta ha sido preparada y sólo tendremos que disfrutar de ella, suntuoso palacio y apuestos invitados se preparan para gustar un baile delicioso ( tres orquestas en directo ), acaso decadente y espectralmente nostálgica ( como la historia rusa misma, mezcolanza de grandeza y miseria a lo largo de los siglos ); diversión y disfrute. El baile va tocando su fin y nos disponemos, como los invitados, a retornar multitudinariamente a la salida; afuera la nieve lo envuelve todo, la calidez festiva va quedando atrás, la imagen sigue la interminable cola de invitados que se dirigiran a la salida..... por otra puerta lateral se ve agua terriblemente fría, acaso hemos olvidado que tan sólo es una arca.... una arca que ha intentado preservar: la memoria rusa